miércoles, 30 de diciembre de 2020

Eres mi fuerza



La vida es maravillosa, y todo comienza el día que nacemos. Cuando un matrimonio tiene su primer hijo, se llena de alegría y esperanza, y si ya tienes dos varones y llega la niña, la felicidad los desborda. Les hablo de mi madre, pero a nadie se le ocurre pensar que una niña chiquitita e indefensa tiene el potencial de madre. Las madres también hemos sido bebés y hemos jugado hemos llorado y hemos soñado. 

domingo, 27 de diciembre de 2020

Ser feliz

 

“Puedes tener defectos, estar ansioso y vivir enojado a veces, pero no olvides que tu vida es la empresa más grande del mundo. Sólo tú puedes evitar que se vaya cuesta abajo. Muchos te aprecian, admiran y aman. Si repensabas que ser feliz es no tener un cielo sin tormenta, un camino sin accidentes, trabajar sin cansancio, relaciones sin desengaños, estabas equivocado.

Ser feliz no es sólo disfrutar de la sonrisa, sino también reflexionar sobre la tristeza. No sólo es celebrar los éxitos, sino aprender lecciones de los fracasos. No es sólo sentirse feliz con los aplausos, sino ser feliz en el anonimato.

La vida vale la pena vivirla, a pesar de todos los desafíos, malentendidos, periodos de crisis. Ser feliz no es un destino del destino, sino un logro para quien logra viajar dentro de sí mismo. Ser feliz es dejar de sentirse víctima de los problemas y convertirse en el autor de la propia historia, atraviesas desiertos fuera de ti, pero logras encontrar un oasis en el fondo de vuestra alma.

Ser feliz es dar gracias por cada mañana, por el milagro de la vida. Ser feliz es no tener miedo de tus propios sentimientos. Es saber hablar de ti. Es tener el coraje de escuchar un "no". Es sentirse seguro al recibir una crítica, aunque sea injusta. Es besar a los niños, mimar a los padres, vivir momentos poéticos con los amigos, incluso cuando nos lastiman.

Ser feliz es dejar vivir a la criatura que vive en cada uno de nosotros, libre, feliz y sencilla. Es tener la madurez para poder decir: "Me equivoqué". Es tener el valor de decir: "perdón". Significa tener la sensibilidad para decir: "Te necesito". Significa tener la capacidad de decir "te amo".

Que tu vida se convierta en un jardín de oportunidades para ser feliz. Que tu primavera sea amante de la alegría. Que seas un amante de la sabiduría en tus inviernos. Y cuando te equivoques, empieza de nuevo desde el principio. Sólo entonces te apasionará la vida. Descubrirás que “ser feliz no es tener una vida perfecta”.

Pero el uso de las lágrimas es para regar la tolerancia. Utiliza las pérdidas para entrenar la paciencia. Usa errores para esculpir la serenidad. Usa el dolor para pulir el placer. Usa obstáculos para abrir ventanas de inteligencia.

Nunca te rindas... Nunca te rindas con las personas que te aman. Nunca renuncies a la felicidad, porque la vida es un espectáculo increíble”

Sermón del Papa Francisco del 6.12.2020

Y hoy, día 27 de diciembre, los cristianos celebramos el “Día de la Sagrada Familia”. El Papa Francisco anuncia un año de la Familia: comenzará el 19 de marzo de 2021, día de San José, y finalizará el 26 de junio de 2022 durante el “X Encuentro Mundial de las Familias”, en Roma.

 

sábado, 26 de diciembre de 2020

Cada vez...


Cada vez que dos personas se entienden y se perdonan, es Navidad.

Cada vez que muestras paciencia con quienes convives, es Navidad.

Cada vez que alguien decide ser honesto en todo lo que hace, es Navidad.

Cada vez que nace un niño, es Navidad

Cada vez que se respeta y se auxilia a un anciano, es Navidad.

Cada vez que dos personas se aman con un amor limpio, profundo y sincero, es Navidad.

Cada vez que miras a alguien con los ojos del corazón, sin juicios o críticas, es Navidad.

Cada vez que alguien socorre y devuelve dignidad a sus semejantes, es Navidad.

Cada vez que divides el pan de tu mesa, es Navidad.

Cada vez que se demuestra amor al prójimo, es Navidad.

Cada vez que buscas dentro de ti y te renuevas, es Navidad.

Cada vez que has inducido al desprecio de un hermano y tomando conciencia de tu mala acción, vas con humildad y sinceridad a reconciliarte con él, es Navidad.

Cada vez que llevado de la furia has ofendido y te arrepientes y pides perdón, es Navidad.

Cada vez que quieras dar sentido y contenido renovado a tu vida, es Navidad.

Porque Navidad es Amor cada día.

Amor todos los días.

Paz todos los días.

Caridad todos los días.

Justicia todos los días.

Comprensión todos los días.

Respeto todos los días.

Sinceridad todos los días.

Acción positiva todos los días.

Verdad todos los días…

Y es a partir de esas actitudes que:

nace la Esperanza,

nace la Alegría,

nace la Concordia,

nace el Entendimiento,

nace la Paz del alma

y la Paz del mundo…

Nunca será una verdadera Navidad, mientras conmemoramos sólo una noche con amor, y nos olvidamos de amar y de respetar el resto del año.

¡Seguramente no es esto lo que Jesús quiere de nosotros!

Entonces hagamos una reflexión y cuidemos los pensamientos, las palabras, las emociones y las acciones para que reine la verdad, la sinceridad y nuestra vida sea una constante NAVIDAD. 

viernes, 25 de diciembre de 2020

Luz Grande

 


¡Aleluya, aleluya! El Niño Dios ha nacido en Belén y el amor nos conduce hasta Él.

«En esta noche brilla una «luz grande» (Is 9,1); sobre nosotros resplandece la luz del nacimiento de Jesús. Qué actuales y ciertas son las palabras del profeta Isaías: «Acreciste la alegría, aumentaste el gozo» (Is 9,2). Nuestro corazón estaba ya lleno de alegría mientras esperaba este momento; ahora ese sentimiento se ha incrementado hasta rebosar, porque la promesa se ha cumplido, por fin se ha realizado. El gozo y la alegría nos aseguran que el mensaje contenido en el misterio de esta noche, viene verdaderamente de Dios. No hay lugar para la duda; dejémosla a los escépticos que, interrogando sólo a la razón no encuentran nunca la verdad. No hay sitio para la indiferencia que se apodera del corazón de quien no sabe querer, porque tiene miedo de perder algo. La tristeza es arrojada fuera, porque el Niño Jesús es el verdadero consolador del corazón.

domingo, 20 de diciembre de 2020

La dulce espera



Muchos de nosotros guardamos en el corazón, como un tesoro, nuestro cariño a la Virgen María. Un cariño que, para muchos es una preciosa herencia de nuestros padres.

Dentro de las tradiciones que existen durante el Adviento, existe una que centra su atención en la gestación de Nuestra Señora. 'María de la Dulce Espera', o la 'Virgen de la Esperanza', es una de las devociones y advocaciones marianas más queridas durante el tiempo previo a la Navidad. La Virgen María, quien se representa embarazada, se convierte para este tiempo en signo de esperanza, porque el Salvador del mundo estará muy pronto en medio de nosotros.

sábado, 19 de diciembre de 2020

Con las alas abiertas

 


Unas alas abiertas expresan libertad, capacidad, poder. Expresan que nos ponemos en camino para cumplir una misión. Expresan que tenemos confianza y seguridad en nosotros mismos. Expresan libertad de acción…

Representan ligereza, espiritualidad, posibilidad de volar y elevarse al cielo. Aspiración del alma al estado supraindividual. Trascendencia de la condición humana. Facultad cognoscitiva, imaginación, pensamiento, libertad y victoria.

jueves, 17 de diciembre de 2020

Historia de Navidad


 

Entré de prisa en la tienda a comprar unos regalos de Navidad a última hora. Al ver a mi alrededor toda la gente que allí había, me molesté un poco. “Estaré aquí una eternidad; con tantas cosas que tengo que hacer” pensé.

martes, 15 de diciembre de 2020

Lo útil y lo valioso

 

Diferencia entre lo útil y lo valioso:

Quizás una de las cosas que más necesitamos 

es aprender a distinguir entre lo útil de lo valioso.

Un sacacorchos es útil.

Una sonrisa es valiosa.

Una puerta es útil.

Un atardecer es valioso.

Un mechero es útil.

Una amistad es valiosa.

Casi siempre, lo útil es más caro que lo valioso. De hecho, lo valioso rara vez cuesta dinero. Y esto ocurre porque el dinero es útil pero no valioso. Lo valioso genera mucha más felicidad a largo plazo que lo útil. Y sin embargo a menudo valoramos más lo útil que lo valioso.

Los mejores momentos no cuestan dinero...

El arrullo de una madre.

Caminar descalza sobre la hierba.

El primer beso.

Ver nacer a un hijo.

Sentir el calor de los abrazos.

Los momentos gratos que se nos pasan por la cabeza, justo antes de abandonar este mundo, no costaron dinero. Esos momentos son lo más valiosos que tenemos.

Entonces, cuando te asalte una preocupación, párate a pensar si lo que buscas es útil o valioso. Aprende a distinguir y te darás cuenta que vivir bien no es tan caro como te habían contado.

Así es la vida, dice Richard Gere, y no hay tiempo para nada más… Nadie escapa vivo de este mundo. Todavía hay tiempo, así que vive por placer, mañana puede que no sea más. Come lo que te apetezca, camina bajo el sol, báñate en el mar… Di la verdad cuando lo sientas. Sé loco, sé tonto, sé raro, sé tú mismo, no hay tiempo para nada más…

 

sábado, 12 de diciembre de 2020

La nobleza

 


Las almas nobles son como la madera del sándalo, perfuman hasta el hacha que las golpea.

La verdadera nobleza es la humildad, es la ayuda desinteresada, es callar la boca antes de ofender, el aceptar a las personas por lo que son y no por lo que uno quiere que sean. Es tener la sensibilidad interna para experimentar lo que otro siente y crear una conexión, llegando a entender sus momentos de desánimo y de profunda alegría, porque todos merecemos estar bien, aunque muchos lloran en silencio esperando que alguien los motive a seguir y los aliente a caminar.

“La verdadera nobleza consiste en saber valerosamente sufrir por los demás y no permitir que los demás sufran por nosotros.” Thomas Carlyle.

sábado, 5 de diciembre de 2020

Tesoro interior

 


¿Qué hay en tu vaso? Imagina que vas caminando con un vaso de café en la mano. De pronto tropiezas, pierdes el equilibrio y el líquido se derrama. ¿Qué derramaste: agua, leche, vino? No, derramaste café porque es lo que había en tu vaso. Del mismo modo, cada uno de nuestros actos da cuenta de lo que llevamos en nuestro interior, y de lo que llevas repartes.

lunes, 30 de noviembre de 2020

Mala reputación

 

Dicen que lo escribió Arturo Pérez Reverte.  Se le atribuye, pero él ha dicho en numerosas ocasiones que este texto no es suyo.

A mí me da igual de quién sea. Podemos identificarnos con lo dicho o no: Estas reflexiones son para reflexionar, y las comparto… Dice así:

En los últimos tiempos mi vida se complica.

No obstante, agradezco a todos mis amigos que todavía se atrevan a relacionarse conmigo, a pesar de todos mis defectos.

Nací blanco, lo que hace de mi un racista.

No voto a la izquierda, lo que hace de mi un fascista.

Soy cristiano, lo que hace de mí un perro engañado (según los moros).

Yo reflexiono sin creerme todo lo que la prensa me dice, lo que me hace un peligroso reaccionario.

Valoro mi identidad y mi cultura, lo que hace de mí un xenófobo.

Me gustaría vivir con seguridad y ver a los delincuentes en la cárcel, lo que hace de mí un bastardo torturador.

Creo que cada uno debería ser recompensado según sus méritos, lo que hace de mí un egoísta antisocial.

Estoy orgulloso de ser español, lo que atenta contra la libertad y el derecho a decidir democráticamente de los pueblos oprimidos.

He sido educado en valores y principios, lo cual hace de mí un carca que se opone al bienestar social.

Creo que la defensa de mi país es cosa de todos los ciudadanos, lo cual hace de mí un militarista asesino.

Pues nada. He aquí una breve reseña de mi mala reputación...

Pero, al menos somos varios: el amigo que me ha enviado el mensaje, tú que lo recibes y yo. 

Demoledora respuesta

 

En ningún momento le ha faltado el respeto, pero le ha debido hacer pupa al tolerante.

Me hago eco de un fantástico hilo de Twitter de hace unos meses, escrito por Susana Pérez y dirigido al Vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, con el que no podemos estar más de acuerdo. En él, esta usuaria hace una demoledora crítica hacia él y todo lo que representa, pero en ningún momento lanza ningún tipo de insulto, improperio o falta de respeto.

Parece ser que el líder de la extrema izquierda ha tenido conocimiento de la existencia de esta carta en forma de hilo y no le ha debido sentar muy bien su contenido, pues, como buen demócrata que presume ser, ha bloqueado a la remitente. El escrito no tiene desperdicio. La carta  de la Twittera dice así:

«Hoy te voy a escribir a ti… únicamente a ti @PabloIglesias.

Tuve la suerte de vivir una juventud en la que daba igual si votabas a unos o a otros. Nadie te preguntaba, y si lo sabían, nadie te odiaba por ello.

También viví una época en la que, para todos, portar la bandera de España era símbolo de celebración o de orgullo, como ese mundial que ganó la selección Española de Fútbol hace diez años, y después la Eurocopa. Nadie te recriminaba nada.

Podías portar la rojigualda con total orgullo y libertad. Podías votar al PP, a Izquierda Unida o al PSOE y todos te respetaban. Y los asesinos eran eso, asesinos…

Hace 23 años que se asesinó a Miguel Ángel Blanco. De rodillas. De un tiro. Mientras toda España manifestándose en Ciudades, pueblos, avenidas…, suplicando que no lo mataran. ¿Y sabes Pablo? Ahí había votantes de todos los partidos, porque antes de que tu aparecieras teníamos mucha más humanidad que ahora.

Y daba igual a quien votaba el vecino. Los principios y las vidas estaban por delante.

Luego apareciste tú, Podemos, Monedero, Irene, Echenique… y de repente aparecieron palabras que yo solo había oído en el colegio y como parte de mi educación, no como adjetivo calificativo hacia ninguno de mis vecinos. Facha, comunista, rojo…

Es más, Franco llevaba muerto y enterrado años. Nadie hablaba de él. Y de repente apareces tú, y se empezó a hablar de Franco, fachas, muertos…, por todos lados.

Los que no han conocido la realidad que yo viví con 20 años, donde todos votábamos y convivíamos con total armonía, hoy destrozan ciudades cuando no les gusta un resultado electoral, destrozan mobiliario urbano…, y eso antes no pasaba. Eso, querido Pablo, se lo has inculcado tú.

Porque tú y los tuyos, solo habéis venido para resucitar problemas, odios y vivir a cuerpo de rey mientras podéis joder al de abajo. Porque antes de que tú aparecieras había ‘respeto’ por los demás.

Porque antes de que tú aparecieras, la política era política, como la que hacía la derecha y como la que hacía el gran Julio Anguita…, política respetando al rival. Porque los políticos son rivales Pablo, no son enemigos como tú has acabado haciendo…, enemigos de todos lados.

Te has convertido en todo lo que criticabas y lo peor es que tus cachorros podemitas, con la cabeza comida por tu desfachatez, defienden que hagas todo lo que criticabas. Qué pena que te gusten las multitudes ignorantes, porque sabes que con una pizca solo de inteligencia, nadie te va a votar. Haciendo ignorante al pueblo y adoptando medidas populistas te votan Pablo, y lo sabes.

Pero parece ser que la España que yo conocía, está despertando. Y te vas a cagar. Prepárate Pablo, lo de Galicia y el País Vasco solo ha sido el comienzo.

Vamos a por vosotros… por haber roto la armonía, el respeto, la convivencia y la paz del pueblo español.

¡Por favor, cierre la puerta al salir!»

No me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de los sin ética. lo que más me preocupa es el silencio de los buenos. Martin Luther King Jr.

Si pones a un comunista a cargo del desierto del Sahara, en cinco años habrá escasez de arena. Sir Winston Churchill.”

 

domingo, 29 de noviembre de 2020

Gaslighting


 

Buscando conocer más sobre el comportamiento de aquellas personas que parece que han nacido para hacer daño y sembrar el sufrimiento, me he topado con un nuevo término para identificarlas: «Gaslighting».

Gaslighting es un patrón de abuso emocional en la que la víctima es manipulada para que llegue a dudar de su propia percepción, juicio o memoria. Esto hace que la persona se sienta ansiosa, confundida o incluso depresiva. Este término, que realmente no tiene traducción al español, viene de la película clásica de Hollywood llamada «Gaslight», en la que un hombre manipula a su mujer para que crea que está loca y así robar su fortuna…

viernes, 27 de noviembre de 2020

Orar y agradecer


ACCIÓN DE GRACIAS DE RUBEN CEDEÑO:

Gracias Padre por mi vida,

que es la tuya y la de los demás.

Gracias por la luz y por las sombras,

que me hacen ver Tu inmensidad.

Gracias Padre por la tierra,

el fuego, el aire y el mar.

Gracias por el amor y por amar,

por saber y tener voluntad,

por un amigo y la humanidad,

por la sonrisa del niño,

por papá y mamá.

Gracias Padre por los negros y los blancos,

los indios, mestizos y zambos,

por las piedras y las plantas,

animales y por los Santos,

por los Tronos, Serafines y Arcángeles,

la Fe, Esperanza y Caridad,

por el reto y por la Paz.

Gracias Padre por las palabras,

la expresión y el poder hablar,

la pintura y las letras,

la música, la escultura,

el teatro y la arquitectura.

Gracias Padre por las ciencias,

las medicinas y electricidad,

por la física y la química,

alquimia y biología.

Gracias por la “Verdad”.

Gracias Padre por ser cristiano,

rosacruz o hinduista,

judío, masón o musulmán,

metafísico o budista.

Gracias Padre porque sabemos que existes

y de muchas formas a Ti podemos llegar.

Gracias por todo,

desde el grano de arena

hasta el sistema solar,

por todas las galaxias,

por sentir, pensar y poder crear.

Gracias por el momento en que puedo meditar,

viéndote en cada sitio de mi diario caminar.

Gracias por poder agradecerte todo lo que me das.


martes, 24 de noviembre de 2020

Signos de tu amor

 

Espíritu Santo... 

Fuente inagotable de todo lo que existe,

hoy quiero darte gracias.

Gracias ante todo por la vida,

porque respiro,

me muevo, 

siento el latido,

mi cuerpo funciona,

mi corazón se emociona.

Hay vida en mí.

Gracias porque a través de mi piel y mis sentidos

puedo tomar contacto con los seres que has creado.

Porque el aire roza mi piel,

siento el calor y el frío,

percibo el contacto con las cosas que toco.

Gracias porque mi pequeño mundo

está repleto de maravillas que no alcanzo a descubrir.

Gracias porque tu amor me llega cada día.

Me rodeas y me envuelves con tu luz.

Gracias porque estás conmigo en todo lo que me pasa,

para que pueda aprender algo de cada cosa que me suceda.

Gracias porque quieres transformar todo mi ser 

con tu vida divina.

Gracias porque cada día es una novedad,

porque siempre hay nuevos signos de tu amor,

porque siempre me invitas a algo más

y siempre me llamas a volver a empezar.

¡Gracias Espíritu Santo!

 

viernes, 20 de noviembre de 2020

Deudas emocionales



Hay momentos en la vida que las personas tendemos a experimentar la sensación de tener deudas emocionales, tanto con personas vivas como con personas que ya no están. Y saldar nuestras deudas con aquellos que ya no viven es, cuanto menos, complicado. En vida podíamos sentirnos en deuda, pero había un después donde se presentara una oportunidad. Ahora no.

Las deudas emocionales con los que ya no están tienen que ver con la sensación de haber causado un daño que ya no podemos reparar. Cuando un ser querido nos deja, la memoria se pone en marcha y las secuencias actúan como jueces que nos pide cuenta y la conciencia se sensibiliza y el arrepentimiento se activa y sientes que no puedes reparar esos momentos donde fallaste, y el pesar te pesa y la culpa arde como una brasa que no te deja vivir en paz.

miércoles, 18 de noviembre de 2020

Sin amor...

 

La inteligencia sin amor...

te hace perverso.

La justicia sin amor...

te hace implacable.

La diplomacia sin amor...

te hace hipócrita.

El éxito sin amor...

te hace arrogante.

La riqueza sin amor...

te hace avaro.

La docilidad sin amor...

te hace servil.

La humildad sin amor...

te hace orgulloso.

La verdad sin amor...

te hace hiriente.

La autoridad sin amor...

te hace tirano.

El trabajo sin amor...

te hace esclavo.

La pasión sin amor...

te hace promiscuo.

La oración sin amor...

te banaliza.

La ley sin amor...

te esclaviza.

La fe sin amor...

te fanatiza.

El diálogo sin amor...

se convierte en una discusión enfermiza.

La cruz sin amor...

se convierte en injusta tortura.

La vida sin amor…

no tiene sentido.

lunes, 16 de noviembre de 2020

Hay gente...

 

Hay gente que te la hace fácil la vida.

Que te allana el camino.

Que te corre las piedras que vos no viste

porque estabas demorada en otro pantano.

Gente que festeja tu sonrisa.

Que te pone una manta,

porque como tiene frío

se adelanta al tuyo.

Gente que te escucha con el corazón

y mirándote a los ojos.

Gente a la que no le importa

gastar un minuto en discutir algo

que no le suma a ninguna de las dos partes.

Gente que te cuida,

te valora y te respeta,

sobre todo,

cuando estás ausente.

Es gente que te quiere sin vueltas.

Sin enrosques.

Sin pedido de facturas ni reproches.

Gente que te elije por tu compañía.

Por quién sos.

Porque acepta tu herida y tu belleza.

Gente buena.

Gente que vuela con tu vuelo

y te recuerda los tres deseos

que te tocan para tu cumpleaños.

Gente que alimenta tu alma.

Sana. Cura. Salva.

Esa gente se vuelve imprescindible.

Se cuida como oro.

Esa gente es necesaria

y uno tiene que valorarla cuándo está,

no cuándo hace falta.

A esa gente se la ama. Y punto.

Lorena Pronsky


 

sábado, 14 de noviembre de 2020

Confianza para confiar

 


Las personas con las que sincerarnos son un soporte emocional muy necesario en nuestra vida. Son figuras soporte que alivian tensiones y que nos escuchan. Las personas con las que sincerarnos apenas caben en los dedos de una mano. Cuesta encontrarlas, pero cuando damos con ellas la vida pesa menos, los problemas se vuelven livianos porque compartimos complicidades, miedos, ansiedades y también felicidades.

martes, 10 de noviembre de 2020

Analogía

Dios con nosotros...

Cuando Dios quiso crear peces, le habló al mar.

Cuando Dios quiso crear árboles, le habló a la tierra.

Cuando Dios quiso crear al hombre, se volvió a Sí mismo y dijo: 

Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza.

Sabemos que, si sacamos un pez del agua, morirá. 

Si removemos las raíces de un árbol, también morirá. 

Igualmente, cuando el hombre se desconecta de Dios, muere.

Dios es nuestro entorno natural. 

Fuimos creados para vivir en Su presencia. 

Tenemos que estar conectados con Él, 

porque solo con Él existe la vida.

Permanezcamos conectados con Dios.

Recordemos que el agua sin peces sigue siendo agua, 

pero los peces sin agua no es nada.

La tierra sin árboles sigue siendo tierra,

pero el árbol sin tierra no es nada.

Dios sin el hombre sigue siendo Dios, 

pero el hombre sin Dios no es nada.

Cuando una persona actúa emocionalmente aislado de la presencia de Dios, puede dar rienda suelta a manifestaciones dolosas, que en muchas ocasiones son el producto de heridas, rechazos, falta de perdón, rabia, rencor, lo cual le hace formar una barrera espiritual que le impide conectar con Dios. Dichas actuaciones llevan a la persona a hacer y decir cosas que no vienen de su espíritu, porque se siente vacía por dentro.  

Haz que tu relación con Dios sea tu primera prioridad en tu vida. Los afanes de la vida nos desgatan y consumen. No permitas que todas las cosas de este mundo roben el tiempo que le pertenece a Dios. 

Ora. Dile lo que está en tu mente. Háblale acerca de tus preocupaciones. Pídele lo que necesitas y lo que quieres. Reza por las necesidades de otras personas, por los que te critican y humillan para que se den cuenta de su error y se arrepientan. 

Dios contigo: Tú con Dios. Ya lo decía Santa Teresa: ...Quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta...


sábado, 7 de noviembre de 2020

Bichos invasores


 

Habitamos un planeta lleno de vida: animales y plantas luchan por la subsistencia y el hombre, animal y rey de los animales, vive gracias y a costa de los animales y plantas. Ahora que hablando de animales…, yo me paso la vida dando gracias por vivir en el tiempo que vivo y dónde vivo.

Te cuento. ¿Te imaginas vivir en tiempo de los dinosaurios? Me aterra sólo pensarlo. Esos bichos enormes…, bichos no, moles impresionantes que levantan la pata y te aplastan. Ahora que vivir en la sabana africana entre tantas fieras acechando todo el día, tampoco es atractivo. Y las selvas tropicales nada me atraen. Sí, mucho canto de pájaros, pero deambulan miles de bichos que mejor poner tierra de por medio. 

martes, 3 de noviembre de 2020

Cuando se cierra la casa de los abuelos


Cuando se cierra la casa de los abuelos... Pienso que uno de los momentos más tristes de nuestra vida llega cuando se cierra para siempre la puerta de la casa de los abuelos, y es que al cerrarse esa puerta, damos por finalizados los encuentros con todos los miembros de la familia, que cuando se juntan en ocasiones especiales, enaltecen los apellidos, y permanecerán siempre unidos por el amor y en honor a los abuelos, y en los recuerdos estarán siempre como cómplices de los encuentros.

Esos encuentros con todos los miembros de la familia que enaltecen su linaje cuando se juntan como si de una familia real se tratase, llevando siempre por bandera a los abuelos, cómplices de todo.

Las tardes de alegría con tíos, primos, nietos, sobrinos, padres, hermanos e incluso novios pasajeros que se enamoran del ambiente que allí se respira. Ni siquiera hace falta salir a la calle, estar en la casa de los abuelos es lo que todo el mundo necesitaría para ser feliz.

Durante esos encuentros familiares de los domingos o en Navidad no llegas a pensar ¿y si esta fuera la última vez? Cuesta aceptar que los encuentros tengan fecha límite, que algún día el silencio se apodera de la casa y todo estará cubierto de polvo y las risas serán un recuerdo de tiempos mejores.

Los año pasan, encuentros tras reencuentros y sin darnos cuenta pasamos de ser niños abriendo regalos a sentarnos todos los adultos en la misma mesa, saboreando desde el postre del almuerzo hasta el aperitivo de la cena, porque cuando se está en familia el tiempo no pasa y el aperitivo es sagrado.

Las casas de los abuelos siempre están llenas de sillas, nunca se sabe si un primo traerá a la novia, a un amigo o al vecino, porque allí todo el mundo es bienvenido.

Saludas a la gente que pasa por la puerta, aunque sean desconocidos, porque la gente de la calle de tus abuelos es tu gente, es tu pueblo.

Cerrar la casa de los abuelos es decir adiós a las canciones con la abuela y a los consejos del abuelo, a las galletas a los caramelos a las monedas que te dan a escondidas de tus padres como si de una ilegalidad se tratase, a llorar de risa por cualquier tontería y a llorar por la pena de los que se fueron demasiado pronto.

Así que si tienes la oportunidad de llamar a la puerta de esa casa y que alguien te abra desde dentro debes aprovecharla cada vez que puedas, porque entrar ahí y ver a tus abuelos sentados esperando para darte un beso es la sensación más maravillosa que puedas sentir en la vida. Cuando ellos no estén se cierra la puerta de la casa y la familia muere un poco con ellos, y las relaciones se van distanciando y ya nada será lo mismo.

Si resulta que ahora os toca ser abuelos, nunca pierdan la oportunidad de abrir las puertas a tus hijos y a tus nietos y celebrar con ellos el don de la familia, porque solo en la familia es donde los hijos y los nietos encontrarán el espacio oportuno para vivir el misterio del amor a los más cercanos y a los que te rodean.

Queridos abuelos. Queridos padres… Para los que no están mis mejores pensamientos, un beso, un abrazo, un te quiero, un te echo de menos, un hasta luego, un te espero, un silencio prolongado en el tiempo. Hoy el pensamiento se alimenta de tantos recuerdos, mientras el alma se bebe las agrias lágrimas del desconsuelo.

Quien pasó por nuestra vida y dejó luz, ha de resplandecer en nuestra alma para toda la eternidad. 

lunes, 2 de noviembre de 2020

Recordándoles siempre

 

Aristóteles decía que: Recordar a un ausente es una experiencia emocional de estilo agridulce, pues, si por un lado nos dolemos por la ausencia, al mismo tiempo no hay forma de ser conscientes de la ausencia sin recordar la presencia y ésta, la presencia, es en esos momentos más dulce que nunca.

Rescatando el sentido de este día, propongo un brindis por los que ya no están. Por los abuelos, padres, tíos, primos, hermanos. Por los amigos y amores que se fueron tan de mañana.

Ya son polvo de estrellas que iluminan el cielo, pero mantienen sus lares en nuestro corazón. A todos y cada uno de ellos, un cálido recuerdo y tres palabras: gracias, los quiero, les echo de menos...

Por los que no están con nosotros.

Por los que faltan y dejaron su ausencia escrita en recuerdos.

Por aquellos que dejaron de ver nuestros ojos 

y nosotros los suyos.

Por aquellos que el corazón les falló 

y dejaron de escribir notas en la partitura de nuestra vida.

Por aquellos que prometieron ser felices 

y murieron luchando por conseguirlo.

Por aquellos que no llegaron a serlo…

Por aquellos que murieron con una sonrisa en la cara

y miles de recuerdos vividos.

Cuando alguien a quien amamos muere, nunca lo podemos olvidar por completo. Nosotros simplemente aprendemos poco a poco a seguir la vida sin ellos. Y siempre los mantenemos bien guardados en nuestro corazón hasta el último día de nuestra vida.

Un brindis por aquellos que nos sonríen desde las estrellas...

Mamá, papá: 

todo mi amor para ustedes, 

que me faltan hoy

y todos los días…

domingo, 1 de noviembre de 2020

El dolor del adiós

 


«Mostrar sentimientos por la pérdida de un ser querido es vergonzante para muchas personas». Esto decía hace unos años a Laura Peraita el director general del Centro de Humanización de la Salud, José Carlos Bermejo que está acostumbrado a lidiar con la muerte de los pacientes que están en cuidados paliativos y, al mismo tiempo, a dar consuelo a los seres queridos que viven con gran angustia la última fase vital de sus familiares. Asegura que la pérdida de un ser querido constituye una de las experiencias más intensas que los seres humanos atravesamos en nuestra vida. «Nos duele en función de la naturaleza y el vínculo que manteníamos con él». Y asegura que, tras una muerte cercana no hay que resignarse, sino «reinventarse».

miércoles, 28 de octubre de 2020

Con las manos

 —Abuela, ¿cómo se afronta el dolor?

—Con las manos, cariño. Si lo haces con la mente en lugar de aliviar el dolor, este se endurece aún más.

—¿Con las manos abuela?

—Sí. Nuestras manos son las antenas de nuestra alma. Si las mueves tejiendo, cocinando, pintando, jugando o hundiéndolas en la tierra, envías señales de cuidado a la parte más profunda de ti. Y no habrá señales de dolor y tu alma se ilumina porque le estás prestando la atención que necesita.

—Entonces ¿las manos son realmente tan importantes?

—Sí, hija mía. Piensa en los bebés: comienzan a conocer el mundo gracias al toque de sus pequeñas manos.

Si miras las manos de los viejos, te cuentan más sobre su vida que cualquier otra parte del cuerpo.

Todo lo que se hace a mano se dice que está hecho con el corazón.

Porque es realmente así: las manos y el corazón están conectados.

Los masajistas lo saben bien: cuando tocan el cuerpo de otra persona con sus manos crean una conexión profunda. Es precisamente a partir de esta conexión que llega la curación.

Piense en los amantes: cuando se tocan las manos, hacen el amor de una manera más sublime.

—Mis manos abuela… ¡no he sabido utilizarlas y a partir de ahora quiero usarlas como lo haces tú!

—Muévelas, mi amor, comienza a crear con ellas y todo dentro de ti se moverá. El dolor no pasará, y en cambio lo que hagas con ellas se convertirá en la obra maestra más hermosa. Y ya no dolerá más, porque habrás sido capaz de transformar su esencia.

Elena Bernabè

sábado, 24 de octubre de 2020

Tormenta


 

Tormenta y tempestad se parecen, pero no es lo mismo. La palabra tormenta se utiliza para designar principalmente a aquellos fenómenos meteorológicos que se generan de manera relativamente abrupta y que se componen por fuertes lluvias, nubarrones, truenos y relámpagos, posibles caídas de granizos y otros elementos que contribuyan a generar una sensación de caos urbano. Las tempestades son conocidas por suceder en altamar, donde  la furia del mar desata olas gigantes que se traga cualquier barco. De todas maneras, ambos fenómenos son parecidos y pueden ser considerados tempestades siempre y cuando impliquen algún grado de desorden o violencia.

martes, 20 de octubre de 2020

Confianza en la madre

 

Una madre y su hijo iban a cruzar un río. La madre le dice:

Hijo toma mi mano.

Él le respondió:

No mamá, toma tú la mía.                         

La madre pregunta:

 Hijo, ¿cuál es la diferencia?

El hijo contestó:

Si pasara algo mientras cruzamos el río, quizás yo suelte tu mano. Pero si tú tomas la mía, estoy seguro que pase lo que pase no me soltarás.

lunes, 19 de octubre de 2020

La vida buena

La vida buena...

La vida buena, no la buena vida.

Esa que escapa de lujos, excesos y oropeles.

La que no cae en las redes del consumo,

ni reduce el gozo humano a vivir acumulando.

La que piensa más allá de pensar en ella misma.

La que no cierra las puertas, la que extiende la mano.

La vida buena, no la buena vida.

Esa que se conforma al pan de cada día.

La que no tiene paredes que la protejan,

ni seguros, ni preocupaciones, ni miedos.

La que se abre a los pobres y distintos.

La que comparte con ellos techo y sueldo.

La vida buena, no la buena vida.

Esa que no se achata por abajo ni por arriba.

La que no se aviene a propiedades,

ni facilidades ni protagonismos.

La que abre, sin descanso, caminos

a la paz, al amor, a la fe y a la alegría.

Seve Lázaro, sj.

sábado, 17 de octubre de 2020

Mudanza


 

El hogar: mi casa, tu casa, es un lugar de apego seguro y un referente importante de nuestra vida. En nuestra infancia, nos acoge, nos da afecto y nos protege. Y durante la adultez, nos afirma y nos da seguridad. La casa nos afinca a un lugar y nos hace tener raíces.

Solemos buscar en nuestra casa el calor familiar de hogar, el olor a comida caliente, el colchón que descanse los anhelos, el refugio que proteja los miedos. Cuando pasamos las jornadas fuera por motivos de trabajo, resolver asuntos o porque salimos a pasear, cansados de calle deseamos llegar a nuestro hogar, como si nos diera ese calor afectivo que tanto necesitamos y nos arropara con seguridad y calma. “Hogar dulce hogar”.

jueves, 15 de octubre de 2020

Santa Teresa de Jesús

 


“En la cruz está la gloria y el honor, y en el padecer dolor, vida y consuelo, y el camino más seguro para el cielo.”

Hoy 15 de octubre la Iglesia católica celebra la Fiesta en honor a Santa Teresa de Jesús o de Ávila, Virgen y Doctora de la Iglesia, una española y mística carmelita, patrona de las escritoras: La primera mujer, junto a Santa Catalina de Sena que recibe el título de Doctora de la Iglesia.

“Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa, Dios no se muda, la paciencia todo lo alcanza; quien a Dios tiene nada le falta: solo Dios basta”. Estas líneas corresponden a uno de los poemas que escribió la gran Santa Teresa de Jesús, la primera mujer declarada Doctora de la Iglesia, y que pueden ser consideradas como una de las plegarias más hermosas que existen. Santa Teresa de Jesús —o de Ávila, en virtud del lugar donde nació— fue la reformadora del Carmelo en el siglo XVI, y fundadora de la Orden de las Carmelitas Descalzas.

Los hijos se van

Hay que aceptarlos con esa condición,

hay que criarlos con esa idea,

hay que asumir esa realidad.

No es que se van...

es que la vida se los lleva.

Ya no eres su centro.

Ya no eres propietario,

eres consejero.

No diriges, aceptas.

No mandas, acompañas.

No proyectas, respetas.

Ya necesitan otro amor,

otro nido y otras perspectivas.

Ya les crecieron las alas y quieren volar.

Ya les crecieron las raíces y maduraron por dentro.

Ya les pasaron las borrascas de la adolescencia y tomaron el timón.

Ya miraron de frente la vida y sintieron el llamado,

para vivirla por su cuenta.

Ya saben que son capaces de las mayores aventuras

y de la más completa realización.

Ya buscaran un amor,

que los respete, que quiera compartir,

sin temores ni angustias las altas y las bajas en el camino,

que les endulce el recorrido y los ayude en el fin que quieren conseguir.

Y si esa primera experiencia fue equivocada,

tendrán la sabiduría y las fuerzas, para soltarla, así,

otro amor les llegará para compartir sus vidas en armonía.

Ya no les caben las raíces en tu maceta,

ni les basta tu abono para nutrirse,

ni tu agua para saciarse,

ni tu protección para vivir.

Quieren crecer en otra dimensión,

desarrollar su personalidad,

enfrentar el viento de la vida,

al asombro del amor y el rendimiento de sus facultades.

Tienen un camino y quieren explorarlo.

Lo importante es que sepan desandarlo.

Tienen alas y quieren abrirlas.

Lo importante es que sean limpias,

de un vuelo alto y de conciencia recta.

Tienen juventud y quieren vivirla.

Lo importante es el corazón sensible,

la libertad asumida y la pasión a flor de piel.

Que la rienda sea con responsabilidad,

y la formación, llena de luz.

Tú quedas adentro:

En el cimiento de su edificio.

En la raíz de su árbol.

En la corteza de su estructura.

En lo profundo de su corazón.

Tú quedas atrás:

En la estela luminosa que deja el barco al partir.

En el beso que les mandas.

En el pañuelo que los despide.

En la oración que los sigue.

En la lágrima que los acompaña.

Tú quedas siempre en su interior,

aunque cambies de lugar.

Zenaida Bacardi de Argamasilla