Sabios pensamientos

Es curioso que la vida cuanto más vacía, más pesa… 

Soy fuerte porque fui débil, estoy en guardia porque fui traicionado, me río porque estuve triste y vivo al día porque mañana no es seguro. 

Hay una grieta en todo, así es como entra la luz. 

Cuando se mira el mundo solo se puede ser pesimista, pero cuando se pasa a la acción solo se puede ser optimista. 

Lo que más me sorprende del hombre occidental es que pierde la salud por ganar dinero, después pierde el dinero por ganar la salud. Y, de tanto pensar en el futuro, no disfruta del presente, por tanto, no vive ni el uno ni el otro. Vive como si nunca hubiese de morir, y muere como si no hubiera vivido.

Inténtalo una y otra vez, hasta que el miedo te tenga miedo. 

Aquellos que no aprenden nada de los hechos desagradables de sus vidas, fuerzan a la conciencia cósmica a que los reproduzca tantas veces como sea necesario para aprender lo que enseña el daño de lo sucedido. Lo que niegas te somete. Lo que aceptas te transforma. 

Que tu meta hoy sea ganarle a tu mejor excusa. 

Tu enemigo no muere por el veneno de tu rabia, si no por el antídoto de tu serenidad. 

Entre lo que pienso, lo que quiero decir, lo que creo decir, lo que digo, lo que quieres oír, lo que oyes, lo que crees entender y lo que entiendes, existen nueve posibilidades de no entenderse. 

La vida tiene diferentes capítulos. Un mal capítulo no significa el final de la historia. 

A veces tienes que olvidar lo que sientes y recordar lo que mereces. 

No existen caminos equivocados, si no giros inesperados. 

Si aspiras a gustar, estarás preparado para ceder en cualquier asunto y en cualquier momento, y entonces no conseguirás nada. 

Se amable con todos, sociable con muchos, amigo de pocos y enemigo de nadie. 

Eres quién eres y lo que eres por lo que ocurre en tu mente. Puedes cambiar quién eres y lo que eres cambiando lo que ocurre en tu mente. 

El problema no es el problema, el problema es tu actitud hacia el problema. 

Con la lengua se tropieza más seguido que con los pies. 

Rodéate siempre de personas que reten tus límites; nunca de personas que limiten tus retos. 

No salgas de ti para ser una víctima, ve adentro de ti y sé el maestro de ti mismo. 

Afortunadamente siempre existe otro día, otros sueños, otras risas, otras personas y otras cosas.