domingo, 19 de enero de 2020

Voy a seguir...


Desde que llegamos a la vida descubrimos el amor a través del amor que nuestros padres nos brinda con sus atenciones, sus desvelos, su paciencia, su entrega… El amor de nuestros padres despierta en nosotros el amor. Todo lo que nos separe del amor incondicional a los padres se interpondrá entre nosotros y los demás, por tanto, el amor se aprende y se repara con los padres. 

Llena del amor de mis padres, decía Flor, puedo seguir caminando por la vida y podré aguantar las tempestades de aquellos que no les mostraron cariño y que se ríen de su dolor obviando su mal comportamiento. Cuando nuestro amor hacia los padres fluye, fluirá también hacia los demás, por eso:

Agradezco y Bendigo el matrimonio de mis padres.
Agradezco y Bendigo el momento sagrado de mi nacimiento. 
Gracias Mamá, Gracias Papá, por la Vida que me fue dada a través de Ustedes. 
Honro en ti, Mamá, la Mujer que fuiste-eres
y tomo toda tu Historia tal y como fue. 
Honro en ti, Papá, el Hombre que fuiste-eres
tomo toda tu Historia tal y como fue. 
Hoy me reconozco ante Ustedes más pequeña
y por ello me inclino ante sus Historias
y ante el Pasado que me heredaron. 
En mi presente voy libre hacia mi destino con Ustedes en mi corazón, reconociéndote a ti Mamá, como la primera mujer existente en mi vida y a ti Papá, como el primer hombre de mi existencia. 

La vida está llena de razones para continuar, motivos para sonreír y personas por las cuales levantarnos cada día, y cuando te levantes abre las puertas de tu corazón a la alegría y envía la tristeza a un viaje sin retorno porque tus acciones te acompañan... 

Gracias a Dios por darme a mis padres. 
Gracias a la vida que me inspira me renueva y me llena de esperanza. 
Gracias a todos los órganos de mi cuerpo que me proporcionan bienestar. 
Gracias a todas las personas que se cruzan en mi camino
y me brindan su amistad. 
Gracias a las personas que aparentemente me hacen mal
porque puedo perdonarlos y dejarlos marchar. 
Perdonar no es olvidar, es recordar sin que te duela. 

Si pudiera volver el tiempo atrás, solo sería por estar de nuevo con ustedes, mamá y papá, para alegrarnos de las cosas bonitas que llegaban a nuestra vida y compartir confidencias y sueños. Pero hay que aceptar los designios de la vida y doy gracias a Dios porque, en mi memoria y recuerdo están tan vivos que los escucho y los percibo a mi lado. Hoy fue un día especial para ustedes y yo me sigo regocijando y enorgulleciendo de tenerlos como padres. 

Este bello poema escocés dice: 
Puedes llorar porque se ha ido o puedes sonreír porque ha vivido. 
Puedes cerrar los ojos y rezar para que vuelva 
o puedes abrirlos y ver todo lo que ha dejado. 
Tu corazón puede estar vacío porque no lo puedes ver 
o puede estar lleno del amor que compartisteis. 
Puedes llorar, cerrar tu mente, sentir el vacío, dar la espalda 
o puedes hacer lo que a él y a ella le gustaría: 
sonreír, abrir los ojos, amar y seguir. 

Mamá, papá, bajo sus mirada celestial, eso voy a seguir haciendo: sonreír, abrir los ojos, amar y seguir caminando con destino a dónde ustedes me esperan…

Fotografía: Internet

No hay comentarios :

Publicar un comentario