Nunca habíamos tenido la oportunidad de ver las cosas tan claras. Hoy vemos las diferencias abismales que se interponen entre los que exprimen y los oprimidos. Hace 20 años, las diferencias salariales entre directivos y asalariados era de 10-20 veces, hoy de 100-200 y hasta rayar en el delito… Había sospecha del ‘trapicheo’ de los altos despachos, pero la sorpresa es que no existen límites. Poco a poco salen a la luz y vamos conociendo los indignantes abusos de un submundo que actúa con total impunidad. Hoy la economía está asfixiada por los ‘guantes blancos’ y paga el pueblo con intereses.
Los políticos son conscientes de que la situación caótica que vivimos es fruto de su mala gestión, mejor dicho, de sus derroches y abusos despilfarradores, pero saben que nadie les va a pedir cuenta para reclamarles nada. Son ‘aforados’ y están protegidos por la ley, porque la ley no ve delito, lo achaca a fallos del sistema —pues ¡cambie el Sistema!— Los políticos quedan impunes pero los ciudadanos, cual reo, sufren el castigo y pagan.
Al trabajador se le exprime: se le retiene más, se le baja el salario, le suben impuestos, alimentación, transportes, etc. Todo recae sobre el asalariado, los millonarios y los políticos, ¡intocables!
Los ‘mini gobiernos’ están recortando en personal y salarios, ¿y ellos qué? ¿No hay un sólo asesor que les obligue a recortarse el sueldo y le aconseje que utilicen su coche, que paguen sus viajes, su móvil, su ropa y que algún asesor de más, se despida…?
Para ejemplo el del Parlamento Canario, que también sufre ‘los recortes’: rebajará las ayudas para gafas y dentistas… ¡Cuánto sacrificio! ¡Eso es una burla! Si el resto de los mortales no tenemos ninguna ayuda. ¡Vaya ejemplo!
El Gobierno de Canarias recorta de aquí y de allá y sube tasas, pero bien que podía ahorrarse un cargo que es una carga de la que se puede prescindir. La figura del Diputado del Común, sobra, y el coste es indignante.
Creo que el señor Jerónimo Saavedra ya ha cumplido su labor y puede vivir dignamente de las pagas vitalicias y además, por su edad merece vivir sin preocupaciones.
Quiero hacer llegar mi queja al Diputado del Común del alto coste que supone para los canarios su prescindible cargo…
Plantilla Orgánica del Diputado del Común (ustedes hagan los cálculos de lo que le cuesta a las arcas canarias):
- 1 Técnico de Administración (cat. A).
- 1 Archivero Bibliotecario (cat. A).
- 2 Técnico de Gestión (cat. A/B).
- 1 Operador Informático (cat. III).
- 7 Administrativas (cat. C).
- 1 Trabajador Social (cat. II).
- 4 Administrativo (PL) (cat. III).
- 3 Ordenanzas-conductores (cat. IV).
- 7 Asesores (cat. A).
- 1 Jefe de Gabinete y Relaciones Institucionales (cat. A).
- 3 Auxiliares de Gabinete (cat. C).
¡Increíble! ¿De verdad que el señor Paulino se está apretando el cinturón? Por el bien común, ¿cuántos médicos y maestros se pagaría con el presupuesto de este común Diputado?
El trabajo es un bien común. Desempeñar un trabajo es prestar un servicio a la colectividad, cada uno en su faceta cumple una labor imprescindible para la buena marcha del país. Pero para desarrollar un trabajo hay que esforzarse y prepararse para cumplir con eficacia, ahora que los sueldos no hacen justicia, si no vean:
- Un maestro por prepararte para la vida: 1.400€.
- Un policía por arriesgar por ti su vida: 1.600€.
- Un bombero por salvar tu vida: 1.800€.
- Un médico por mantenerte con vida: 2.200€.
- Un diputado por j… la vida: unos 7.000 euros —entre pitos y flautas— y son para toda la vida. ¡No más sueldos para toda la vida!
Pero para ser policía tienes que tener bachillerato superior y hacer oposición, igual que para optar a bombero.
Para ejercer como maestro tienes que tener el bachillerato superior, título universitario (cuatro años) y una oposición.
Para ejercer como médico tienes que tener el bachillerato superior (la nota más alta en la selectividad). Título universitario (seis años). Oposición a MIR. Especialidad (obligatoria 4 años para medicina general ó 5 años el resto de especialidades).
Total once años en el mejor de los casos.
Ahora viene lo mejor… diputado: ningún requerimiento, ni titulación, ni oposición, solo el dedo y la ambición…
España es diferente y tanto… ‘Somos únicos’. Al parecer tenemos trescientos mil (300.000) políticos más que Alemania ¡con la mitad de población! Si todavía no lo creen… a saber:
- 445.568 políticos.
- 165.967 médicos.
- 154.000 policías.
- 19.854 bomberos.
Resulta que tenemos más políticos que médicos, policías y bomberos… ¡juntos! Podemos comprobar que la sangría de España es la clase política. Así nos va… Otra forma de medirnos con nuestro entorno es a través del salario mínimo interprofesional: Luxemburgo 1.750 €, Irlanda 1.653 €, Bélgica 1.389 €, Holanda 1.385 €, Francia 1.350 €, España 624 €. Los políticos sí están equiparados (son de 1ª clase). Las comparaciones son odiosas pero estas son indignantes.
Últimamente vivimos con pesadumbre y tememos enfermar. La sensación de desamparo es preocupante, ya que hacer frente a una enfermedad es un lujo que muy pocos se pueden permitir. Mientras que a la sombra se cierne un entramado privatizador donde los lazos familiares entran en el beneficiario tejido empresarial… Con la cantinela de la crisis nos quitan de aquí y de allá, y ahora van y se lo dan a los Bancos, un mercado lleno de ‘jugadores de póker’ tramposos. «A río revuelto ganancia de pescadores». Inquietante este mundo económico financiero.
Los especuladores de la economía inflan y desinflan las cuentas sin que el organismo regulador se percate de nada, porque si no, actuaría a tiempo y no habría que intervenir, ni rescatar, ni sanear ninguna entidad bancaria. Urge una reforma financiera y la despolitización.
Estos días nos sorprende Rato-Bankia. Se desploma en Bolsa por el empache de activos tóxicos por culpa de los ladrillos. No es por los malos gestores (políticos y sindicalistas) que no han sabido administrar y controlar los despilfarros ¡No! Tiemblan los que han depositado sus pequeños ahorros. Rato se va por la puerta de atrás, pero tranquilo porque nadie le va a pedir cuenta.
Ahora el Estado sale al rescate, inyecta dinero público y comienza la andadura de un nuevo presidente: José Ignacio Goirigolzarri que conoce muy bien los entresijos financieros.
Según Goirigolzarri, asume la presidencia de Bankia «para mejorar su rentabilidad». El reto del cargo es hacer la entidad «más fuerte, rentable y potente». Como todos, va a por todas. Este señor tiene experiencia de sobra —es un prejubilado del BBVA— y al parecer negoció una millonaria jubilación vitalicia. ¿La conservará y además cobrará un salario millonario en Bankia? Ahora los consejos delegados y ejecutivos los reparte entre sus amigos, se asignan unos sueldos millonarios y todo irá bien. No sé si se salva Bankia, pero a un grupo de amigos le irá mucho mejor… España empequeñece por abusos que indignan.
Fruto de las actuaciones políticas, España está inmersa en una crisis económica, social y moral. La sufren y padecen los españoles, los políticos viven en el ‘país de las maravillas’…
Fotografía: Hartwig HKD, cc.
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