Siempre agradecida

Del día que es hoy, cómo voy a olvidarme del día que es hoy, no podré olvidarme porque un día como hoy naciste tú, mamá; mi MADRE con mayúscula. Y si tú no hubieses nacido, tampoco yo sería quien soy, y estoy orgullosa de ser quien soy. 

El amor de una madre no se puede superar. A nuestra Madre le debemos la vida y muchísimo más, por eso, mientras la tengas a tu lado debes demostrarle tu gratitud y tu amor incondicional, porque las madres no son eternas… 

Hoy todo lo que quiero decirte te lo diré en el lenguaje del corazón, con el cariño que nos brindamos y compartimos, puedo seguir viviendo sin ti. Eras muy familiar, estuviste siempre pendiente de toda la familia, y a pesar de que recibiste desprecios, seguías prestando ayuda, porque generosa lo fuiste y mucho.

Siempre te dije y digo que eres la mejor madre. Siempre presente, apoyándome en todas las cosas y potenciando mis cualidades para que yo pudiera convertirme en una gran mujer. 

Fuiste paciente en todo momento y me enseñaste a ser grande y fuerte. A ser paciente, comprensiva y responsable. Me enseñaste el verdadero valor de la buena gente, de la sinceridad y la honestidad. Me enseñaste el valor de las buenas relaciones, del respeto, de la solidaridad. Me enseñaste que ser inteligente no es malo, y que aquellos que envidian esa cualidad simplemente no vale la pena ponerles atención. Me enseñaste a luchar por mis sueños, a demostrar mis valores y a potenciar mis aptitudes. Y lo más importante, me diste la vida. Te preocupaste en todo momento por todos y por mí, procurando cuidarme para que creciera sanamente y sin problemas. Tus cualidades te hacen grande y destacas especialmente por ser mi madre. 

Quiero darte las gracias por ser mi apoyo, por contenerme cuando lo necesité, por decirme la verdad cuando era necesario, por estar ahí conmigo. Quiero agradecerte por ser fuerte y nunca bajar los brazos mientras me criabas a mí y a mis hermanos. Por ser tan brillante y solidaria, pues no dudabas cuando de ayudar a alguien se trataba. 

Gracias por enseñarme a ser una buena persona. Gracias por alegrarte por mi felicidad y llorar por mis tristezas; por celebrar mis triunfos y por enseñarme a aprender de las derrotas, pero lo más importante, gracias por ser la mejor madre. 

Gracias por compartir conmigo tu conocimiento y experiencia, por tus desvelos y lágrimas; gracias por haber estado conmigo en todo momento. Tú fuiste la luz en mi camino y siempre pudimos contar la una con la otra. Gracias, porque sé que no existe un amor tan profundo y tan verdadero, nunca nadie me va a transmitir esa paz y tranquilidad como cuando te tenía a mi lado. 

Gracias por ser mi ejemplo, tu ejemplo ha sido todo para mí y sé que siempre te sentirás orgullosa de mí, porque eres la persona que mejor me conoces y ahora puedes ver hasta mi corazón, por eso te pido ayudes a tus hijos que han abandonado el sendero de valores y buena conducta que tú nos marcaste. 

Gracias, porque aun estando enferma has tenido el valor de sonreír y hacerme fuerte, siempre pensando en mi felicidad antes que la tuya. Gracias por ponerme primero antes de que tus necesidades, por compartir tu comida y por preocuparte cada vez que sentías que algo no estaba bien. 

Gracias Mamá, por ser la madre más valiente y decidida del mundo, invencible ante la vida y luchadora por tus hijos. Gracias por hacerme crecer, por defenderme, por darme tu apoyo siempre y tu amor inagotable, y sobre todo, gracias mamá porque sé que desde donde estás sigues velando por tus hijos. Sé que siempre cuidaras de mí, porque el amor de una madre es infinito y porque a pesar de que haya pasado el tiempo siempre seguiré siendo tu pequeña. 

Una madre de verdad no tiene siete vidas, pero si es preciso daría la única que tiene por sus hijos queridos. Amo y admiro a esa Mujer que nunca se cansó de luchar por su familia y le agradezco a Dios por esa gran Madre que me dio la oportunidad de tener. 

Madre, la muerte no existe, la gente solo muere cuando la olvidan. Yo nunca te podré olvidar, siempre vivirás en mí porque el amor nunca muere y siempre te recordaré. 

Madre, a ti siempre agradecida, que Dios te de ese beso y ese abrazo que yo no puedo darte. Te quiero y te extraño hoy y toda la vida. Te recuerdo, Madre mía, hoy y siempre. ¡Te quiero Mamá!

Fotografía: LoveToTakePhotos