Veredicto: ¡culpable! Todos creemos tener poder para acusar y juzgar, pero como no somos jueces, para librarnos de la ley debemos anteponer el ‘supuesto’ aunque sea culpable. Queda dicho: de todo aquel que yo piense que es culpable debo decir ‘supuesto culpable’ mientras no lo diga un Juez.
Veredicto es la denominación, utilizada en el Derecho procesal, para designar la decisión que toma un Jurado: decisión final de un tribunal. Opinión o juicio que da una persona tras pensar cuidadosamente pero, por desgracia, hoy todos se entrometen en la vida del otro con total impunidad. Los más que pecan son los que primero tendrían que dar una vueltita por su casa y seguro tendrán mucha miseria propia de qué hablar… De nada vale llevar una vida discreta y ordenada. Ser persona de valores e intachable despierta envidia y hace que te manchan con mentiras, calumnias y falsos testimonios. Inventar historias con tal de desprestigiar, eso es delito. Por tanto, si nos toca vivir esa situación de familiares o amigos hay que denunciarlo, pero a veces se peca de bueno y dejas correr el tiempo a ver si todo pasa, aunque el daño deja secuelas dolorosas.
Una cosa es lo personal y otra bien distinta, y que sí nos compete, es la gestión política, laboral, administrativa… Sobre la situación desesperada que vivimos actualmente en España, todos estamos buscando culpables aunque hay dedos que señalan directamente.
Vivimos una situación desesperada, convulsionada y nuestra capacidad de aguante se debilita, porque vemos como toda las cargas se recargan sombre los hombros más lacerados, esos millones de españoles que cobran unos 1000 € al mes, para mantener a unos 4 ó 6 miembros de familia (lo que una merienda para más de un político a cargo del erario).
Todos castigan y se abastecen de las familias. La Hacienda Pública al acecho… El gobierno retiene para dar prestaciones, pero recorta las prestaciones y hace pagar por lo que ya te retiene.
Los empresarios recargan sobre los precios todas las exigencias del gobierno; paga la familia. La cesta de la compra por las nubes, el Gobierno recorta las ayudas al campo y mano de obra, agua de riego, abonos y merma de las cosechas por sequía o tormentas; paga la familia. Si sube la gasolina (en España la más cara de Europa), suben los transportes y repercute en todo; paga la familia.
La familia paga todos ‘los platos rotos’ de España. Los miluristas pagan por ellos, por los más pobres y por los ricos… ¿Acaso el asalariado es el culpable de todos los males ocasionados por el Gobierno de un País? El Gobierno no da nada gratis, todas las prestaciones las hemos pagado y, encima, aumentan las retenciones, suben impuestos, gasolina, luz etc. A cambio te bajan el sueldo y te hacen pagar por lo que ya has pagado y te sientes angustiado, abatido, desolado, desprotegido…
No hay nada más frustrante que sentirte abandonado por quienes tienen que ser tu protector y encima te echa encima sus cargas. De los ricos saben poco, pero de los pobres lo saben todo. Es inquietante saber que saben todo sobre ti; tu NIF te deja al descubierto. Hacienda controla tu nómina, tus cuentas y tus gastos, saben con quién hablas por teléfono, si viajas, si vas al médico y si pagas con tarjeta. Sí, es inquietante…
Inquietos andamos estos días. Más que inquietos, alarmados, nerviosos y apesadumbrados… ¿Quién es culpable de esa situación? Los que tienen que cuidar de que no estemos en esa situación. ¿La Sanidad? Pues la Sanidad ya no cuida, enferma. Todos estamos con ansiedad, los enfermos esperando respuestas, y a los pobres pensionistas que cobran 700 € al mes les hacen pagar sus medicamentos —esto debe ser un mal sueño—. Trabajando toda la vida por la dignidad del obrero y contribuyendo a construir un País mejor, para que ahora, en su jubilación les obliguen a mendigar para no pasar hambre. Ellos ya han padecido de hambre… No es justo arrebatar a los mayores lo que les pertenece.
Ahora los jubilados tendrán que pagar un porcentaje por los medicamentos… Según los políticos, los 8 euros suponen cuatro cafés. ¡Hay que ver!
Esta arrogancia deja entrever la calidad humana de quienes nos gobiernan. Ellos se asignan grandes sueldos y se colman de prebendas, o lo que es lo mismo, ¡les pagamos todo! La tecnología móvil para que hablen y estén al día. ‘Dietas’ para comer bien. Billetes para viajar, coche con chófer y para su coche la gasolina para toda la familia. Tarjeta para pagar todo lo que se le antoje, sin límites, y podemos seguir enumerando e indignándonos. Pues ¡no! ¿Qué son 8 euros? Para un jubilado 8 euros es la comida de todo un día para una familia con hijos en paro a su cargo…
No hay derecho a que nos hagan sentir tan indefensos. En todos los órdenes sentimos el desamparo y la indiferencia y eso nos aboca a la depresión, desvalidos rozamos la desesperación y entras en un estado de desinterés hasta por tu propia vida. Sientes tristeza e impotencia cuando ves a algún conocido en esa situación tan desesperada. Van, puerta por puerta, buscando trabajo, encuentran promesas, pero nada… De la nada no se vive. Sé de pensionistas que tienen que ayudar a varias casas de familias porque sus hijos están en el paro. Tiene que ser duro que pudiendo trabajar tengas que pedir comida a tus padres que son pensionistas y a los que querrías estar ayudando por todo lo que han hecho por ti… Es duro, humillante y muy doloroso.
Los políticos pueden prometer y prometen, pero todos mienten. La política ha perdido la credibilidad porque los políticos son personas no creíbles. La Justicia ha perdido la credibilidad, porque no es independiente y los juristas son hombres no creíbles. Las Leyes han perdido la credibilidad porque se legisla y se aplica a conveniencia por personas no creíbles. Frente a un panorama tan desolador, el ciudadano tiene la sensación de desamparo y no encuentra dónde refugiarse.
Sobre la situación actual de los españoles se ha escrito mucho y se seguirá escribiendo. He leído escritos muy fuertes, con graves acusaciones y reproches hacia los gobernantes, pero el que más me ha sorprendido por su crudeza en las palabras ha sido el de José Luis San Pedro, escritor, economista y humanista que aboga por una economía «más humana, más solidaria, capaz de contribuir a desarrollar la dignidad de los pueblos».
Cualquier persona con sentido común y mínimamente humana, no queda indiferente a la gravísima situación que padecen millones de españoles. No puedes quedar impasible y tienes que levantar la voz frente a tanta injusticia social.
El veredicto para los políticos es el de ¡culpables!, aunque ellos se descargan sus culpas: unos en los anteriores gobernantes y otros en la situación global… Los políticos si que saben librarse de sus culpas, ellos nunca son culpables, los culpables son siempre los otros…
Hay cantidad de frases ilustrativas de célebres personajes refiriéndose a la política que quiero compartir con ustedes…
«El Gobierno es como el órgano digestivo de los bebés: mucho apetito en un extremo y ninguna responsabilidad en el otro».
Ronald Reagan.
«Dar dinero y poder al Gobierno es como darle una botella de wisky y las llaves de un coche a un adolescente».
P. J. O’Rourte.
«En general, el arte de gobernar consiste en quitar la mayor cantidad posible de dinero a una parte de los ciudadanos para dársela a la otra».
Voltaire.
«Un Gobierno que roba a Pedro para pagarle a Juan siempre dependerá del apoyo de Juan».
George Bernard S.
«La ayuda exterior es como una transferencia de dinero de los pobres de los países ricos a los ricos de los países pobres».
Douglas Casey.
Estas frases están cargadas de verdad, verdad que por otra parte conocemos los sufridos y vapuleados contribuyentes. Por eso estamos en disposición de poder decir que los Gobiernos son los culpables de todos nuestras dificultades como País, y culpables de la perdida del Bienestar Social de los españoles.
Veredicto para el Gobierno de España: ¡Culpable! No lo dice un Juez, lo dice el ‘Pueblo Español’, que es ‘Pueblo Soberano’.
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