Fuero del trabajo

Fuero. Leyes. Derechos. Los trabajadores han luchado toda la vida por defender y hacer valer sus derechos y esa lucha ha dado frutos, pero ‘mi gozo en un pozo’ porque, a estas alturas, un mal aire quiere barrer de un plumazo todo lo conseguido. Cuando hablamos de derechos laborales se puede caer en el error de que se han conseguido gracias a la democracia y a los partidos de izquierdas, nada más lejos. En España, el más que ha hecho por los trabajadores no ha sido la democracia, ni el socialismo, ni el centroderecha, ha sido el que ordenó y mandó durante 40 años… A los datos me remito, tenemos las pruebas:

España sólo ha tenido un verdadero socialista, que se llamó: Francisco Franco Bahamonde, los de después no han inventado ni han mejorado nada.

Las leyes del Fuero del Trabajo. Ya en plena guerra civil, el 9 de marzo de 1938, Franco dicta la Ley del Fuero del Trabajo en beneficio de los trabajadores. En base a esta ley fundamental, se aprueban las siguientes leyes:

-1 de septiembre de 1939: Ley del Subsidio familiar.

-23 de septiembre del 1939: Ley del Subsidio de vejez.

-13 de julio de 1940: Ley del Descanso dominical y días festivos.

-25 de noviembre de 1942: Ley de Patrimonios Familiares.

-14 de diciembre de 1942: Seguro Obligatorio de Enfermedad.

Para dar cobertura a la Ley del Seguro Obligatoria de Enfermedad, se construyó una red hospitalaria, dependiente de la Seguridad Social:

-Residencias hospitalarias: 292.

-Ambulatorios: 500.

-Consultorios: 425.

-Residencias concertadas: 96.

Para ir mejorando y conformando los Derechos de los Trabajadores:

-26 de enero de 1944: Contrato de Trabajo, Vacaciones retribuidas, Maternidad para las mujeres trabajadoras y Garantías sindicales.

-19 de noviembre de 1944: Paga extraordinaria de Navidad.

-18 de julio de 1947: Paga extraordinaria del 18 de julio.

-14 de junio de 1950: Reforma del I.N.P. (Instituto Nacional de Previsión) para una mejor cobertura en la acción protectora.

-22 de junio de 1956: Accidentes de Trabajo.

-24 de abril de 1958: Convenios colectivos.

-23 de abril de 1959: Mutualidad agraria. En esta ley se encuadran 2.300.000 trabajadores del campo, por cuenta propia y ajena.

-2 de abril de 1961: Seguro de Desempleo.

-14 de junio de 1962: Ayuda a la Ancianidad.

-28 de diciembre de 1963: Ley de Bases de la Seguridad Social.

-31 de mayo de 1966: Régimen Especial Agrario.

-2 de octubre de 1969: Ordenanza General del Campo, donde se establece la jornada laboral de 8 horas.

-20 de agosto de 1970: Mutualidad de Autónomos Agrícolas.

-23 de diciembre de 1970: Ley de Empleo Comunitario.

Así que en la Ley del 9 de julio de 1976, todos los trabajadores españoles ya teníamos cubiertas todas las contingencias enumeradas por el Estado Español.

¡Quién nos lo iba a decir! Dejamos de ser esclavos gracias a Franco que dictó leyes en beneficio de los trabajadores, logrando que los empresarios, caciques y explotadores respetaran al obrero —hasta ahora— y muchos pensando que era cosa de izquierdas y gracia a la democracia, y hay quien cree que es gracias al empeño y lucha de la pareja UGT-CCOO. ¿Éstos? ¡Son vividores!

Salarios y condiciones dignas para el trabajador es obra del ‘dictador’, y quiero dejar claro que no es santo de mi devoción, como tampoco lo es Carrillo, recién fallecido y por la misma razón.

Los extremismos ideológicos de derechas e izquierdas pecan de lo mismo, no toleran la libertad de expresión, mataron y matan por imponer sus dictados y tanto Franco como Carrillo, por sus postulados, representan la intolerancia extrema y por ello tienen todo mi rechazo… Los extremismos han sembrado y regado la tierra de sangre y muerte, el dolor y sufrimiento producido está latente y aún sigue sangrante, y afloran las lágrimas en la memoria del tiempo…

Pienso que en la defensa de los derechos tanto laborales, como sociales no debe haber color ni ideología: tiene que ser el objetivo prioritario la preocupación y ocupación de todo buen político por aplicar políticas para proteger y defender a la sociedad.

Fallan los políticos y creemos tener el respaldo y el amparo de la ley. Estamos decepcionados al ver cómo salen a la luz casos donde la ley se cuestiona porque queda en evidencia lagunas que restan credibilidad y firmeza. Vemos que no se respeta, tanto los juristas como los políticos la tergiversan con total ligereza, lo que demuestra que no tiene fuerza ni peso, porque se manipula, se rompe, se cambia a gusto de cada quién…

Tenemos la sensación que la ley está en manos de los poderosos, el pobre y el obrero se pueden morir. Aunque por una parte la teme, por otra no siente el justo amparo, porque hay claroscuros que es fácil quedar a merced de la opinión personal de quién te juzga… Eso es lo peor que nos puede pasar: no poder depositar la confianza ni en las leyes ni en quienes nos gobiernan.

Hoy en día el paro sangra a España y el Fuero del Trabajador está ‘herido de muerte’, y el vulnerable obrero queda a merced del empresario, sin base legal que le defienda y ampare…

En estos malos tiempos más de uno recuerda al pequeño dictador.

Fotografía: Lewis Hine.