miércoles, 20 de septiembre de 2017

Fuego en los montes


En la copa de un pino
el canario lamentaba:
¡Mi casa se ha quemado!
No hay ramas donde anidarla.

Sus plumas las lleva negras
de posarse en cada rama,
busca a su compañera:
¡Ay! ¿Dónde estará mi amada?

Tristes trinos lleva el viento
recorriendo las montañas.
El humo ahoga el aire.
El fuego quema sus entrañas.

El cielo se ha oscurecido.
Los pinos no tienen ramas.
Las ha devorado el fuego…
Cenizas que grita y clama.

¡Fuera el fuego de los montes!
¿Dónde la bendita agua?
que sofoque la agonía
de mi tierra. ¡Ay! qué magua.

Los pájaros están cansados
de tanto agitar sus alas,
para apagar ese fuego…
Gran Canaria se desangra.

En los montes de mi tierra
ya no vive la esperanza.
Se ha teñido de luto.
En el canario… añoranza.