Para dar a conocer algo se hace promoción y la mejor manera es a través de campañas publicitarias, que sirven para resaltar todas las bondades, porque sólo tienen bondades. A veces las campañas te seducen y adquieres el producto, y la mayor de las veces te llevas un desengaño al comprobar que las bondades no son tales y te sientes estafado.
Otras promociones… Estamos de nuevo en Campaña Electoral y la verdad, que cansan. Otra vez la verborrea del «Yo», porque solo «Él» puede hacer algo por «Ti». Ya que sólo piensan trabajar por y para ti, tus problemas son los suyos, y él te soluciona todo. ¡Qué bonito! Todos los rincones, otra vez, llenos de caretos, no hay carretera que no esté empapelada y te impide disfrutar del paisaje. ¿Eso es necesario? Si ya los conocemos a todos y sobra toda esta promoción. ¿Campañas para presentar lo que ya conoces? Si ya nadie nos engaña. La gestión de los que están hablan por sí sola, y los que tienen posibilidades de entrar también tienen un periodo de gestión y puede ser que esa experiencia en tareas difíciles inyecte un poco de esperanza, aunque lo tienen bien difícil para que afloren de verdad «los brotes verdes». No los brotes verdes que nos vendía el mismo que no veía venir la crisis, esa crisis que ahora es la culpable de los males del país, porque no quiere asumir la responsabilidad de su mala gestión y su indiferencia a las advertencias, las cuales obviaba porque, según él, no iba con «nosotros». Estábamos a salvo porque él, el gran capitán, está al mando del barco y nada hará zozobrar su nave, bueno… sí, podría tambalear por culpa de la oposición y de los demás países.
El señor Zapatero, aunque hace poco se responsabilizó del alto índice de paro, se va a ir de rositas dejando a España llena de espinas, y el señor Rubalcaba se nos presenta como si las travesuras junto a Zapatero no fueran con él, es decir, cándido e inocente. Lo más bueno de la campaña es el mensaje: «Pelea por lo que quieres», encima nos pide que peleemos porque él no tiene intención de pelear.
Es verdad, usted está en el gobierno disfrutando de la velada y así quiere seguir, y si algo queremos, pues a pelear toca ¿no? Usted ya no nos engaña, pues ha demostrado con creces su valía y su capacidad de gestión, y no nos meta miedo con lemas y videos catastrofistas, alertando de que si viene la derecha se acaban los servicios públicos y todo el «bienestar» que ustedes nos han proporcionado.
El Partido Socialista Obrero Español, no ha destacado precisamente por ser el partido de la defensa de los obreros, nunca antes hubo tantos obreros en paro, tampoco por socialistas, yo diría que son muy capitalistas, supuestamente, se nota mucho lo de «lo mío pa' mí y lo tuyo también», al menos eso es lo que dan a entender; ya no visten de pana, viven en grandes chalets y atesoran grandes riquezas, por tanto, ¿socialistas?
Pienso que las Campañas son desproporcionadas y largas, se podría reducir la parafernalia y dar mayor oportunidad a partidos con menos peso, ya que parece que sólo existen el PP y el PSOE.
Que gane el mejor… pero el que gane lo va a tener muy difícil, porque la Economía no admite mucha política, o sí. La Economía es un entramado mundo que sólo conocen y entienden los que lo manejan, y se sostiene en cifras ficticias con denominaciones diversas para definir el funcionamiento que regula la mecánica bursátil. Últimamente nos desayunamos con los datos económicos y cada día vamos descubriendo nuevas definiciones para el sobresalto y la pesadumbre por el futuro que nos espera.
Perdonen ustedes pero, sin ser entendidos en la materia —y entendidos son los que se mueven en el mundo de la Bolsa—, sí escuchamos, y por los medidores bursátiles vemos que pasamos de España va bien a entrar en recesión, es decir, que de una gripe hemos pasado a una pulmonía y estamos entrando en la UVI: que si por los mercados, que si la debilidad del euro, que si el Ibex, que si la deuda exterior, que si la pública y la soberana, que si la prima de riesgo —que las hay—. En fin, que esta tormenta financiera nos tiene al borde del precipicio y van a venir al rescate y eso, no es buena señal. Una moneda tan joven y está ya asfixiada, la euforia inicial llevó a la especulación y, ¿esta es la consecuencia?
Hace poco que Francia y Alemania aprobaron un fondo de rescate de un billón de euros. Parece ser que ese dinero no existe, ese dinero puede venir de bonos de países emergentes, como China, India… pero mientras se nos llena la boca… ¿han visto cuánto manda Alemania? Alemania gobierna a Europa y se la come… No se sabe y parece ser que China está comprando tierras por África —en grandes proporciones— para producir alimentos y abastecer a su inmensa población, de ser así, produce inquietud.
Tormenta financiera en el Banco Central Europeo, tensión en el mercado de deuda soberana de la zona euro… en fin, que mientras Europa recula, el dragón chino emerge y nos devora. Los tentáculos chinos se extienden y los demás países no pueden competir, y no pueden competir porque los derechos de los trabajadores hay que respetarlos, y en China los trabajadores no tienen derechos. Los hacen trabajar en pésimas condiciones por un sueldo infame, pero los países democráticos callan y otorgan, y cierran fábricas permitiendo que se violen la dignidad de los trabajadores. Al cederles la producción y comprarles productos estamos autorizándoles y capacitándoles para continuar sin considerar a los trabajadores. Hay que defender los derechos humanos, y el silencio no siempre es bueno.
Acaba la función. Durante la Campaña hemos oído mucho palabrerío. ¿Quién recuerda lo mucho que se ha dicho? Se termina esta Campaña y toca reflexionar, tenemos un día en blanco para pensar con lógica. Los sondeos dan paso a la realidad de las urnas y con nuestra confianza otorgamos poder y fuerzas a quienes tengan que regir y batear con esta crisis de técnicas bursátiles que llaman Economía. «Sin inyectarse la prima de riesgo» Sr. Rubalcaba, hay que poner en marcha medidas impopulares pero necesarias para atravesar el largo túnel con algo de luz. Estas medidas tardías serán muy duras. Si se hubiera hecho caso a las advertencias hace cuatro años, hoy tendríamos una situación más tranquila, con menos desencanto y menos indignados, pero entonces se burlaron y al tiempo, alucinando, veían brotes verdes… ¿Los has visto? Vota… ¡Tu voto es un brote verde!
Fotografía: Amio Cajander, cc.
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