El almendro pertenece a la familia de las Rosáceas, cuyo nombre botánico es Prunus amygdalus Basch, tiene su origen en el oeste de Asia y se encuentra muy presente en toda la cuenca Mediterránea.
El sistema radicular está constituido por unas pocas raíces de mayor diámetro, que se desarrollan en amplitud y profundidad. Su tronco cuando es joven es liso, pasando a ser muy agrietado con el tiempo, siendo este agrietamiento característico de esta especie. Sus hojas son de tipo lanceolado, largo, estrecho y puntiagudo. Su flor es pentámera con cinco sépalos, cinco pétalos con colores variables entre blanco y rosado. La época de floración en el almendro tiene una gran importancia porque influye directamente en las posibilidades de obtención de una buena cosecha, debido a la incidencia de tres factores: la polinización, las lluvias y las heladas. Las lluvias durante la floración impiden el vuelo de las abejas que desarrollan mayor actividad cuando la temperatura ambiente oscila entre 15 y 16º C. Se recomienda el cultivo en laderas soleadas para escapar de las heladas y potenciar la actividad de las abejas.
El fruto, la semilla es el producto de consumo; posee dos tegumentos envolventes difícilmente separables, la testa y el tegmen, que inicialmente son verdosos, pasan a color amarillo y de él a castaño claro y marrón, que va oscureciéndose con el tiempo; siendo un buen índice de envejecimiento de la semilla que está protegida por la drupa de endocarpo duro e interior correoso. Las almendras las hay dulces y también amargas.
La principal utilidad de éste árbol es la alimenticia, ya que su semilla, la almendra, es comestible y es muy habitual encontrarla en forma de fruto seco y utilizarla en confitería o en la elaboración de sopas y verduras. Además, y debido a su valor nutritivo, la leche de la almendra se ha empleado tradicionalmente como complemento alimenticio en caso de anemias, o incluso, durante el embarazo.
Sin embargo, este árbol posee otras cualidades como las propiedades medicinales. Y es que algunas variedades de almendras son empleadas para tratar enfermedades de la piel, así como para elaborar mascarillas con efectos faciales nutritivos y revitalizantes. Asimismo, se emplea la almendra para fabricar productos con el fin de tratar quemaduras superficiales y dermatosis. Por último, indicar que la variedad amarga contiene ácido cianhídrico por lo que ya no se emplea en hostelería por ser peligroso para la salud.
En Gran Canaria, el almendro se cultiva en mayor medida en Tejeda y Valsequillo y en febrero se celebra su floración: ‘Las fiestas del Almendro en Flor’. Las cumbres de Gran Canaria se engalanan con las flores del invierno. El Roque Nublo parece orgulloso de tener a sus pies las praderas verdes con un mar de flores, que desafiando al frío, muestran toda su belleza y color e iluminan la tierra que la sustenta. Con las almendras de Tejeda se elaboran, industrialmente, diferentes productos típicos del lugar: variados dulces, mazapanes, bienmesabe, etc. Dichos productos se pueden encontrar por toda la isla de Gran Canaria.
En febrero con motivo de la fiesta de la flor, tanto Valsequillo como Tejeda reciben y agasajan a los visitantes con lo mejor de la tierra: comida canaria, música y alegría. El paisaje se presenta de ensueño: montañas y laderas con un manto de terciopelo verde, el agua formando hilitos serpentea por riscales y barranquillos, el aire fresco y limpio te envuelve en aromas y sabores que hacen del día una jornada inolvidable, tanto si hay sol, como si están presentes las brumas.
Las Fiestas del Almendro en Flor de Tejeda, se celebran durante la segunda semana de febrero —este año del 6 al 14— y se remontan al año 1970, organizadas por los jóvenes del lugar con el objetivo de conservar y difundir aspectos de la cultura y tradiciones propias y de toda la isla, donde se da cita lo más representativo del folclore canario: música, bailes, artesanía, deporte autóctono, ferias de ganado y demostración de faenas típicas de labranza, todo, para goce y disfrute de lugareños y visitantes.
La cumbre de Gran Canaria nos invita, nos acoge y nos ofrece el paisaje y el aire más puro y limpio de la isla, clima y aire puro del enclave y la altitud, una altitud muy igualada de la que goza Tejeda, Artenara y mi pueblo, Juncalillo de Gáldar.
LOS ALMENDROS DE LA CUMBRE
El Nublo se ha engalanado
con las flores del almendro.
También el Bentayga noble
está orgulloso y contento.
Nublo y Bentayga adornados
con un manojo de flores.
Los almendros florecidos
al aire emanan olores.
Anuncian a todos los vientos
que llega la primavera.
Invitan a los canarios
a celebrarlo en Tejeda.
Fotografía: El Coleccionista de Instantes Fotografía & Video, cc.
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