El drama que no cesa

El drama que no cesa… La violencia machista no da tregua. Es lamentable como un día sí y el otro también nos llegan las crónicas negras teñidas de sangre, sumando muerte y más muerte de mujeres a manos de sus verdugos.

Es triste y conmovedor escuchar de boca de una mujer: «Nunca he podido decidir por mí… Primero bajo la autoridad de mi padre, después bajo la opresión de mi marido y ahora bajo la tiranía de mi hijo».

Juncalillo

En la cumbre de Gran Canaria

existe un pueblo escondido,

con su gente sencilla y distinguida,

que se llama Juncalillo.

Enterrado entre montañas,

con una atmósfera de paz y tranquila,

surcado por sus barrancos

y sus típicas casas cueva.

Con sus diferentes barrios:

desde la Gloria a Barranco Hondo,

Andén, Vecindad, Gitana,

pasando por mi Tablado.

No hace demasiados años,

en esos tiempos en que llovía,

los barrancos eran como ríos

que ni cruzar se podía.

Años en que de la tierra

se sacaban grandes cosechas

de papas, millo, cebada,

trigo, naranjas o ciruelas.

Aún recuerdo esos tiempos

de prosperidad y bonanza,

había riqueza abundante,

vivían todos de la labranza.

Para las grandes recolectas,

plantar, trillar o lo que fuera,

se invitaban unos a otros

y se daban grandes comilonas.

Ahora es un pueblo vacío:

poca gente allí se queda

por no ofrecer futuro

 a una juventud inquieta.

Conservando sus costumbres

y sus fiestas populares,

San Isidro, Santo Domingo

con su Rama inolvidable.

La tierra no se trabaja

todo está abandonado y seco,

los estanques están vacíos:

el panorama no es bueno.

Pero así y todo, sus gentes

no han perdido las raíces:

tienen las cuevas preparadas

para volver si se encuentran tristes.

A cargarse de fuerzas e ilusión

para seguir en la lucha diaria,

soportar la ausencia, los recuerdos,

la nostalgia de su tierra amada.

Ventana abierta

 

La tecnología avanza a un ritmo vertiginoso, y aunque parezca increíble, tras una pantalla las redes de redes invisibles, viajan por el mundo de aquí para allá llevando y trayendo noticias e informaciones de todo tipo. Encuentras verdades y mentiras, bueno y malo, inapropiado y tenebroso…

A esta ventana abierta al mundo se asoman miles de millones de personas; las que ofrecen sus trabajos, proyectos, opiniones, pensamientos y las que se interesan por ver y conocer lo que se publica.

Y yo me he atrevido a buscar un espacio en este mundo oculto, virtual, para interrelacionarme mostrando mi pequeño rincón donde manifestar mis pensamientos, reflexiones, sensaciones y sentimientos. No me adjudico el término de escritora, aunque escribo. He publicado varios libros de poesía, la poesía es mi debilidad, pero me preocupa todo lo que acontece a mi alrededor y me intereso por todo lo humano y divino de la sociedad de mi tiempo; naturaleza, educación, cultura, ciencia..., sobre todo podemos reflexionar y opinar. 

Escribir es un ejercicio solitario, donde escuchar tus latidos y sentir tu esencia, y desde el silencio lo traduces en palabras para comunicar tus emociones. Aunque no es posible conectar con todos los lectores, siempre habrá un lector para cada escritor.

Dijo un sabio que, escritor es aquel que sabe escribir, que tiene algo que decir y que lo sabe decir bien. La literatura española cuenta con grandes escritores de pluma de oro; luego está el escritor profesional, el escritor aficionado y el escritor que sabe escribir. Y no todos los escritores publican libros, hay grandes periodistas y articulistas que llenan páginas en prensa y revistas y que son merecedores de reconocimiento literario.

Decir que las palabras están todas inventadas y todo ya se ha dicho, por tanto, todo lo que yo diga ya está dicho. Mis ideas pueden haber sido ya expresadas, por eso cuando alguien ha tenido mi idea antes que yo, y la ha expresado coincidiendo con mis pensamientos, yo  con su permiso las recojo para decir lo que quiero decir. 

Gracias a los que escriben con sabiduría, que con maestría expresan los argumentos teóricos-prácticos que ayudan a comprender las situaciones y dar soluciones a los avatares del día a día. Por tanto, gracias a toda la gente que escribe y lo que dice coincide con mi mismo pensar y sentir. Porque, aunque cada cual tenga su propia opinión, las opiniones pueden converger con pensamientos diversos.